Todos hemos escuchado en alguna ocasión y en diferentes programas de televisión, fundamentalmente de cocina como el de Karlos Arguiñano, Bruno Oteiza, etc, y en la elaboración de un plato eso de "cómo huele, ojalá hagas televisiones que puedan transmitir el olor".
Ésa fue el fundamento de la ponencia de Andoni Luis Aduriz (Restaurante Mugaritz) en la segunda sesión del Madrid Fusión de este año, junto a Luis Castellanos y Adrian Cheok. En medio de la estupefacción del auditorio, Andoni volvió a provocar una vez más al presentar un dispositivo que permite en cualquier parte del mundo (con conexión a internet y un móvil inteligente) oler un plato hecho en el Restaurante Mugaritz.
Para ello, el usuario tendría que descargarse una aplicación y acceder a la web del restaurante, seleccionar el plato deseado y ver no sólo cómo se elabora el plato, en lo visual y auditivo, sino también en lo olfativo, gracias a un accesorio circular que se acopla al teléfono como el que se indica en la imagen.
Es probable que tal y como expuso
Andoni todos los cambios importantes suelen generar rechazo o incomodidad en la
población, por tanto nos hace sacarnos de nuestro cómodo control. Algo que puede
parecer aberrante en sus inicios, se puede convertir en imprescindible más
adelante (esto ha sido una constante en la historia de la humanidad).
Con independencia de la aprobación
o desaprobación que esta línea de investigación puede provocar, es indudable
valorar la constancia, ímpetu y tesón hacia la creatividad de este genio, que
sigue sin dejar indiferente a nadie.
No hay comentarios:
Publicar un comentario